La pedagogía como un discurso o saber que se interesa por la educación, ha de hacer una reflexión constante sobre el que hacer pedagógico y por ende, sobre los alcances y dispositivos educacionales, además, sobre los medios y los ámbitos educativos...
Algo ha cambiado desde las primeras reflexiones en torno de la educación y nuestros días; el lugar privilegiado de la educación (la escuela), parece no responder a los educandos, ni los docentes a los intereses, entre otras muchas reflexiones. Como señalan los investigadores Diego Alejandro Muñoz y Andrés Klaus en la "Educación en Tiempos Débiles e Inciertos", los dispositivos educativos y los discursos pedagógicos parecen no dar cuenta de un mundo contemporáneo marcado por la contingencia, el riesgo, lo inusitado; un mundo líquido, en terminos de Zigmunt Bauman, donde los solidos construidos en el proyecto moderno se desvanecen, se diluyen, bien sea en un contexto de referentes posmodernos o hipermodernos, lo cierto, es que las realidades actuales desbordan las capacidades comprensivas.
Frente a lo incierto, emerge la realidad como una entidad en desorden (caotica), pero el desorden es nuestra incapacidad de reconocer o construir creativamente o intuir nuevos ordenes que nos permitan pasar de los sistemas estatícos newtonianos a los sistemas altamente dinámicos donde equilibrio y no equilibrio son una constante. Así las cosas la realidad se configura en multiples realidades.
Propiciar espacios de autoorganización, autopoieticos, de creación intuitiva entorno al que hacer educativo, es el primordial de esta bitacora de pensamiento - acción.
Los sencillos sistemas dinámicos no lineales suelen comportarse de forma complicada e impredecible: a esto se le llama caos. La rama de los sistemas dinámicos que trata con la definición e investigación del caos se llama teoría del caos: desde las matemáticas y la física se estudian ciertos comportamientos impredecibles que han sido clasificados en estables, inestables y caóticos.
ResponderEliminarEl primero de ellos, llamado estable, tiende durante largo tiempo a un punto, a una órbita o atractor (puede ser un punto, una curva, una variedad o cualquier asunto que desequilibra el sistema –puede ser un conjunto complicado de estructura fractal). Un sistema inestable, débil e incierto si se quiere, se escapa de los atractores. Y un sistema caótico manifiesta los dos comportamientos: Por un lado, existe un atractor por el que el sistema se ve atraído, pero a la vez, hay "fuerzas" que lo alejan de éste. De esa manera, el sistema permanece confinado en una zona de su espacio de estados, pero sin tender a un atractor fijo. La descripción de atractores de sistemas dinámicos caóticos ha sido uno de los grandes logros de la teoría del caos.
Basados en lo anterior, la Pedagogía del Caos es una nueva concepción y práctica de la pedagogía que parte de nuevas formas de asumir la realidad y el conocimiento; una propuesta cuyos principios plantean sistemas educativos abiertos, donde la diversidad presente tanto en los entornos como en los elementos y grupos, tiende a fluir y reflejarse en todas las dimensiones espacio temporales y de sentido, mediante procesos de mutua consistencia, que al alejarse de las condiciones normales de equilibrio, y por tanto del paradigma humano vigente, propician por autorregulación redes de interpenetración en el conocimiento y en la vida .
Por tanto, posibilidades como las que ofrecen actividades al interior de las ciencias naturales contemporáneas –como la física de los sistemas dinámicos, la teoría de las catástrofes de Tom, las estructuras disipativas de Prigogine, los fractales de Mandelbrot, la sinergética de Haken o la nueva biología, es que este espacio hace parte de un trabajo de investigación que pretende configurar un cuerpo conceptual, un campo epistemológico de la pedagogía en medio de una época que se desarrolla indeterminada y violenta mientras se globaliza.
Es de aclarar que esta pesquisa desde su esencia, quiere una perspectiva para nada universalizante de la reflexión sobre los fenómenos objetivados por la pedagogía: formación y educación.
No se pretende reducir a una sola perspectiva esos fenómenos, pues la complejidad del universo que nos circunda nos da la posibilidad de superar la racionalidad de la parcialización. Por el contrario, se pretende abrir las posibilidades construyendo un mapa de reflexión pedagógica que repiensa la educación y la pedagogía, el saber de la misma, de manera que se abran horizontes y posibilidades: siempre desde la verdad fundamental en el recorrido de esta investigación, y es que vivimos en un mundo que camina por la senda de la incertidumbre y la finitud.
JORGE HERNÁN BETANCOURT CADAVID
Universidad San Buenaventura - Medellín
Facultad de Educación
Docente - Investigador
jhbc35@gmail.com
jorge.betancourt@usbmed.edu.co
Algunas veces, los sistemas tienden a un equilibrio o estado de reposo (Bertalanffy, Ludwin Von), el cual permite o no el desarrollo de nuevas estratégias o generación de fuerzas que vuelvan a generar el movimiento en el sistema y a su vez, permita o no crear un sistema cerrado.
ResponderEliminarEl caos, desde mi punto de vista, es el desarrollo o no-desarrollo del sistema mismo, dando como resultado otro tipo de sistema que hay que evaluar.
Muy poco se conoce sobre el caos y para hablar de ellos, hay que tener un muy basto ( o vasto) conocimiento en diferentes ramas, al menos para darle una definición aceptable, pero es tan influyente este desarrollo o no-desarrollo, que con el simple hecho de hablar de él, ya se ha formado. como recita una frase de Jean-Paul Sartre, "La única manera de saber que la conciencia existe, es tener conciencia de su existencia".
Para terminar, me parece una propuesta muy interesante y a la vez, un arma de doble filo; porque recordemos que el caos desarrolla o no-desarrolla un sistema.
Esteban Zapata Rojas.
Universidad Nacional de Colombia - Medellín.
Facultad de Minas.
Estudiante.
estebanpunk01@gmail.com
estebanpunk01@yahoo.com.co
estebanpunk01@hotmail.com
ezapatar@unal.edu.co
Saludos, la "caotización" de un "sistema" implica mas aún. La energía que se invierte al aparecer un atractor, o que éste invierte para perturbar el sistema original, es enorme, pero además no es lo único, debe existir afinidad...
ResponderEliminarAplicado esto a la pedagogía, necesariamente el principal atractor debe ser el maestro.